Portugal pide un esfuerzo extra a sus trabajadores para alcanzar los objetivos de déficit que impone el rescate. El gobierno de Passos Coellho eliminará dos pagas extra a los funcionarios y amplia media hora la jornada laboral.
Portugal necesita ser más competitiva y alcanzar el objetivo de déficit público del 4,6% en medio de su propia recesión, y además pagar los intereses del rescate.
Para ello, el primer ministro Pedro Passos Coelho, no ha dudado en tocar el mercado laboral. Aumentará media hora la jornada laboral en el sector privado. Los funcionarios que cobren más de 1.000 euros y los pensionistas no percibirán las pagas extra de navidad y verano. Además se reformará el calendario laboral para promover la productividad.
Unas medidas que el dirigente socialdemócrata ha justificado por la necesidad de cumplir con las exigencias del rescate internacional de 78.000 millones de euros:
“Nunca deberíamos haber llegado a esta situación. Cuando fuí elegido primer ministro, nunca pensé que anunciaría al país unas medidas tan duras que son difíciles de aceptar”
Los medios de comunicación portugueses apuntan otras medidas como cobrar peajes en la autovía Lisboa-Oporto, reducir deducciones fiscales a las rentas altas o subir el IVA intermedio al 13 % y el alto al 23.
Todo esto en plena tormenta económica. Para este año Portugal prevé una caída de su PIB del 1,9% y en 2012 del 2%.