06/06/2013 Turquía se prepara para una nueva noche de tensión. En este caso intensificada por la vuelta del primer ministro Tayyip Erdogan de su gira por el Magreb. Allí, ha aseverado que entre los manifestantes hay terroristas.
Acampan en la plaza de Taksim, sus tiendas de campaña forman ya un poblado, con bibliotecas y centros de información. Modifican cánticos populares para pedir la dimisión de Erdogan. Se quejan de intentos de censura de las redes sociales reduciendo el ancho de banda. No les calman las palabras conciliadoras desde varios representantes del gobierno. Esperan el regreso de Erdogan de su gira por el Magreb para intensificar la protesta:
«Estamos esperando a Erdogan. Todos esperamos que traiga novedades. Tal vez cuando llegue esto se parezca a una guerra, con gases lacrimógenos y chorros de agua. No lo sabemos. Seguimos aquí con la esperanza de que ocurra algo bueno»
Firmeza el primer ministro turco desde Túnez. Para muchos, una provocación. Erdogan mantendrá sus planes urbanísticos. Utiliza el término çapulcu, traducible por perroflauta, para referirse a los manifestantes, les avisa además, de que entre ellos, hay terroristas. 4.000 heridos, tres manifestantes y un policía muerto. El balance a la espera de una nueva noche de tensión.