Cuando hablamos de las virtudes de grandes líderes, puede que en muchas ocasiones olvidemos: el perdón, la compasión, los métodos pacíficos. No son tan impresionantes visualmente, pero requieren una dosis de valentía y coraje igual o mayor. Creo que Nelson Mandela es un gran ejemplo de ello.
Nelson Mandela continúa en estado grave pero estable, tras su tercer día de intervención por una afección pulmonar.
El líder sudafricano de 94 años, clave en la lucha contra el Apartheid en Sudáfrica, ha tenido que pasar por el hospital varias veces en los últimos meses. La última en marzo, donde pasó 10 días recuperándose hasta que los médicos le dieron el alta.