Cerca de que finalicen las 48 horas dadas por el Ejército Egipcio para que Mursi pacte con la oposición, el Presidente no parece haber cambiado su postura a pesar de la dimisión de 5 de sus ministros.
Hemos tenido la oportunidad de hablar con el catedrático de la Universidad Complutense y experto en Relaciones Internacionales, Rafael Calduch, quién nos ha asegurado que el Ejército, como garante de la revolución de Nasser, es la única fuerza capaz de obligar a Mursi a negociar un gobierno de concentración. Un desarrollo pacífico de los acontecimientos que lleve a un plan de unidad nacional es la única salida, que Rafael Calduch ve al conflicto. Asegura que no habrá guerra civil, pero sí hay riesgo de que grupos radicales islamistas aprovechen la situación para atentar.
La protesta sigue viva pero Mursi ha rechazado el ultimátum del Ejército. Se ha llegado a especular con la dimisión de su gobierno en pleno. Sólo se ha confirmado la de 5 ministros. El presidente asegura que seguirá en el poder. El Ejército ha dado a conocer su hoja de ruta: O Mursi negocia un pacto nacional, o suspenderá la Constitución, y disolverá el Parlamento. En una escenificación de apoyo a la población, el Ejército sobrevolaba con sus helicópteros la plaza Tahrir, los militares quieren que se escuche a los jóvenes:
Ahmed Maher, líder del movimiento 6 de Abril, “Comprendemos que levantar un país tras una revolución es difícil pero ellos dijeron que tenían las soluciones a todos los problemas de Egipto, muy bien, pues que las muestren…”
Hoy, una encuesta del diario Al Ahram habla de la soledad del presidente islamista. El 73% de los egipcios, según el diario, afirma que Mursi no ha tomado ni una sola buena decisión. En la calle, el riesgo de violencia no deja de aumentar ya que se manifiestan simultáneamente pero en puntos distintos, partidarios y opositores del actual gobierno.