El poder de Vázquez Montalbán de dejarte insomne sólo puede ser comparable al de una bebida energética. Montalbán puede abrumar con su sabiduría, su fantástica forma de enlazar párrafos, sus profundamente satíricas reflexiones, pero de algo puedes estar seguro: tus ojos permanecerán pegados a las páginas mientras viajas en las aguas de un capitán literario, un maestro de acertadas trayectorias en todos sus mapas. Y en una de sus páginas, encuentras, de repente, un párrafo clarificador y profético sobre el actual mercado laboral.
Si los libros tienen propia voluntad, «El escriba sentado» es un lujo para cualquier librería que este libro elija. Las reflexiones del gran Manuel Vázquez Montálban (1939-2003) sobre otros escritores. Una crónica que te habla de su época, te revela sus propios miedos, y te enseña a ser mejor escritor.
En un capítulo sobre Benedetti y el romanticismo, Montalbán nos sorprende con una postdata sobre la metáfora del Sur. Dentro de ella se esconden algunas líneas imprescindibles para nuestra generación, la que nació con la cinta de cassette y ahora escucha música en streaming, pero, sobre todo, la que ha visto como sus mayores se han tenido que adaptar a un mundo tecnológico que nos ha dividido entre los «digitales» y los «analógicos».
La gran brecha digital
Y dice el maestro comparando el enfoque vital sureño y el norteño: «Ese Norte nos prepara una espada de Damocles tecnológica que nos dividirá en útiles e inútiles y jugará a hacernos entrar y salir de un mercado de trabajo, de ese gran mercado de la realidad que es el trabajo».
No es extraño pensar inmediatamente en nuestros padres, obligados por decreto tecnológico y evolutivo a reciclarse continuamente en una tecnología que, algunas veces, les facilita la vida, pero, otras muchas, se la complica en extremo.
Montalbán no se queda ahí. «Ese Norte no está dotado para que cada hombre tenga un pedazo de realidad entre las manos, sino que basa su capacidad de existencia y superviviencia en todos los salarios del miedo», asegura. No sé si conocéis la teoría del miedo, por la cuál una de las más rentables estrategias políticas y económicas es mantener a la sociedad bien acongojada. De esto en algunos oficios se sabe un rato. No hay nada más rentable para que la gente actúe que el miedo.
Vuestra opinión
Para finalizar, que empiezo a sentir miedo de enrollarme en exceso, quería dejar esta reflexión del Montalbán, insertada en el párrafo siguiente a las anteriores… «¿Será el Sur la capacidad de desalinearse de todo lo que sabemnos, creemos, sentimos, en contra de lo que realmente necesitamos saber, creer, sentir?».
¿Qué opinión os merece a vosotros? ¿Es la brecha digital esa espada de Damocles de la que avisa Montalbán?.