La misión más ambiciosa de la Agencia Espacial Europea ha terminado. Rosetta y la nave Philae han interrumpido sus emisiones después de un viaje increíble. Pero esta misión no sólo pasará a la historia como la primera en orbitar un cometa. Por poner sólo un ejemplo, un ordenador con menos potencia que un móvil ha hecho gran parte del trabajo.
Sigue leyendo