Acabo de hablar con una persona de esas que sólo una de esas personas mágicas en tu vida puede presentarte. Se llama Philip Griggs y pronto comenzaremos a conocerle en España. Hemos hablado de muchos temas, sobre todo de cómo ayudar psicológicamente a la gente que está en paro. De la conversación extraigo una frase que no siempre tenemos en cuenta «No fears, you have to focus on hopes and dreams». Porque el miedo muchas veces es el enemigo oculto, el que no nos deja pensar más allá.
La Gran Manzana: clave de algo que ahora mismo no entiendo
Me vais a permitir que no desvele el por qué de la imagen de la Gran Manzana «The Big Apple» porque puede tener en el futuro un valor simbólico que hoy no debo contar.
Philip Griggs ha trabajado como psicólogo con personas con discapacidad que quieren re-insertarse en el mundo laboral, y con desempleados del Reino Unido. Me ha contado casos de gente que ha superado enormes limitaciones gracias al reconocimiento implícito de que «temen» algo. A través de la toma de conciencia en el presente de ese problema, y de un trabajo muy amplio en sus recuerdos, estas personas han conseguido lo que se proponían. Trabajar y trabajar muy bien.
Incluso, hemos hablado de un caso de acoso laboral. Un jefe que no tanto por lo que decía sino por lo que hacía machacaba a una empleada. Philip le ayudó a cambiar su mentalidad, llegó el día en el que incluso consiguió que su jefe cambiara totalmente su actitud hacia ella. De nuevo, rompió con el miedo.
El miedo es uno de los factores que más nos coartan en la vida. El miedo nos hace hacer cosas increíbles, y, a veces, tiene más poder incluso que el amor. Un cierto grado de miedo es lógico y normal por nuestro instinto de supervivencia. Es lógico. Pero la conversación con Philip Griggs y los ejemplos que me ha presentado, me ha hecho recordar un montón de literatura sobre psicología que había leído antes y está claro: uno de los grandes retos de los psicólogos es acabar con los miedos de sus pacientes, hacer que los superen.
Por eso, os remito a la frase con la que empezaba el artículo: «No más miedos, centrémonos en las esperanzas y en los sueños» Tranquilos no soy Rhonda Byrne, y no os quiero convencer de que pensando fuerte, fuerte, en nuestros deseos los vayamos a conseguir. ¿El Secreto? Ese libro apesta.
Pero sí creo en la capacidad que podemos tener de reconocer nuestros miedos, enfrentarnos a ellos, desligarnos del peso que imponen sobre nuestros hombros, centrarnos en trabajar, en conseguir crear esas situaciones que harán que tengamos suerte, en soñar en pequeños objetivos como motivación y ver que los vamos cumpliendo, (no hay nada más frustrante que ponerte objetivos demasiado altos), e ir por la vida con más soltura, sin el yugo que nos impone el miedo.
(Dejo unas palabras clave para el tema de la Manzana: público, Noviembre, año próximo, sueño) Sé que esto no se entiende. ¡Maldita sea! Ahora mismo no lo entiendo ni yo…
Carlos Alameda - Escritor 